Desde la Fundación Barrié se ofertaban estos talleres gratuitos sobre la ciencia y para allá que nos fuimos seis familias en grupo. Nos sorprendió gratamente el despliegue, ocho talleres simultáneos que hicieron las delicias de todos, por la amabilidad de algunos de ellos, que arrasaban con determinado público (la robótica, el laboratorio de cosmética, la creación de fósiles, los juguetes solares o el rincón de amigos de la física). Los niños y adultos teníamos plena libertad para saltar de taller en taller, y así lo hicimos para disfrute de todos, incluso con lugares para descansar entre talleres.
Había también charlas de media hora de diversos temas, pero nuestro grupo es tan movido que no quisieron saber nada de sentarse a escuchar, lo que querían era, como buenos científicos, pasar a la acción, jejeje. Una tarde muy chula, nadie quería marcharse y nos dejamos algunos talleres pendientes para la siguiente ocasión.
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